Cena de boleros

Y por fin llego la tan soñada cena de boleros. =)

Había ido ya a El Tío con música en vivo, hermoso. Aquellas parejas que llegaron a ir también seguramente disfrutaron de esa noche romántica, ¿verdad?. Porque incluso en los ojos de personas que no disfrutan tanto de música vernácula, llegué a notar en su mirada un ligero aire de romanticismo proveniente de su alma.

Pero eso sucedió en la cena "casual" de boleros. La realmente esperada cena de boleros hoy decidí que no tendría lugar. En primer lugar, tengo que agradecer al caballero que quiso complacerme, un gran amigo. Pero la magia no es igual cuando en realidad la cena de boleros vendría originalmente de alguien que quiere conquistarte, no complacerte; pero es un gran detalle de tu parte.

Lo lamentable aqui, es el hecho de que a pesar de saber cuales era las circunstancias, tuve mucha ilusión en "por fin" tener mi cena de boleros. Había imaginado tantas canciones... tanta música... tanta belleza... Pero ya no quiero una cena de boleros... ahora, si alguien intentara conquistarme mediante una cena de boleros lo vería como un cliché "ah...lindo" pensaría... lo lamentable es que ha perdido la magia.

Algún día volveré al tío. A disfrutar del momento.

Moraleja: Recuerden las lecciones alguna vez aprendidas.

Yo alguna vez aprendí que cuando no esperamos mucho sobre algo, se vive al máximo. Así he disfrutado de los mas grandes momentos de mi vida. Momentos que aun atesoro y vuelvo a vivir cuando los recuerdo.

Fue tanta mi ilusión que no espere a disfrutar el momento.


Consejo del chef: Cuando usas mucha sal... un platillo queda salado.

Sopa de letras

Pues resulta que tenia ganas de darle un poco de sazón a esto, pero no encontraba que podía darle un buen toque de picante y de dulce al mismo tiempo. Entonces dije ¿porque limitarme a un platillo? Si en la variedad esta el gusto...

Pero como se me olvido la variedad de platillos que en la mañana tenia toda la intención de servirles, aqui ira una pequeña pero provechosa sopa maruchan, digo... sopa de letras...

resulta que tendré pronto mi tan ansiada cena de boleros yeiii... ya tuve una probadita (con una amiga, un frances y un amigo)... pero como ya me la estaba imaginando de otra forma, creo que por eso no la disfrute del todo... aunque los boleros son los boleros... tal vez luego les cuente como estuvo las delicias del tio... (ah! porque será en El Tio... yeiiii)

La ilusión de alguien que me conquistara con una cena de boleros creo que hacia de esa cena un ideal... aun tengo la esperanza de que en algun futuro eso llegue a pasar jejejeje ¿porqué no?... digo, a menos de que ese dia muera o al dia siguiente, pues no veo porque no pueda tener una cena conquistandome con música de tríos en vivo... pero todo viene a relucir por la "ilusión del amor" ay ay ay ay ay! como diría el buen Speedy González... hay cosas en las que uno no debe de creer... no debe de suponer, y no debe imaginarse sino esperar a que lleguen y dejar que los sorprenda el destino... en una cena de boleros (y vuelve la mula al trigo!) jajajaja total que hay cosas en las que uno no debe pensar...

pero nos gusta dejarnos llevar... por nuestro corazon...

pues por lo pronto mi instinto me dice que hoy será un buen día para unas palomitas del cinepolis... veamos quien será la víctima...

los quiero!

p.d. para los antojos de tanta salidita que hay con el calor, en ayunas tomen una cucharada de aceite de oliva y una de limon...

un beso.

Cena romántica sin amor

Resulta que llego yo a este restaurante por segunda vez, con un excelente amigo. El pide como entrada una pieza de crepa de camarones empanizados, cuando llegan los platillos (porque debido a que yo no pedi entrada todos los tiempos llegaron juntos) el me ofrece de su entrada. Yo accedí a su oferta.

Desde el momento en que acerco la crepa a mi persona, mi sentido del olfato saborea esa delicia de una manera tan impresionante, que aún al día de hoy no olvida la delicia que percibió en aquel momento. Mi corazón palpitó tan fuerte ante aquella sensación que no pude evitar derramar una lágrima ante la belleza de tal creación. Y una vez que probe tal delicia, gracias mi sentido del gusto supe que no había probado un manjar caliente tan delicioso como aquél.

Me encontraba ante un gran dilema. No sabía si guardar aquella belleza en una caja para contemplarta toda una vida (aunque sabía que obviamente aquello era imposible) Si seguirla disfrutando solamente con mi olfato o si saborearla eternamente. Obviamente termine de degustar aquel manjar fue un momento de vuelta a la realidad pero definitivamente les puedo asegurar que mientras duro, aunque mi dilema fue muy fuerte, nada fue tan impresionanmente grande como aquel sabor tan increíble del cual el chef de aquella noche me habia permitido degustar en esa crepa.

Resulta que despues hablé con mi familia y con amigas sobre aquella excelente obra de arte, sin encontrar las palabras justas para elogiar tal belleza pero queriendo (obviamente) compartir con personas tan maravillosas un manjar como aquél. Y una vez que logro llevar (al menos a mis amigas) a aquel lugar y ordeno esas crepas. Si, sabían ricas, tengo que admitirlo. Pero eran unas crepas de camaron empanizado y ya.

¿Dónde quedo la pasion del chef al preparlas?

Como suele suceder, pequé de exagerada. O al menos en apariencia asi fue. Pero les prometo que en verdad derrame una lágrima de lo hermoso que fue el sentimiento que me provocaron las crepas aquella vez que tuve la dicha de conocer íntimamente su belleza. Les prometo que aquel sabor fue tan maravilloso que aun mi corazón palpita cuando mi sentido del olfato recuerda haber notado cada ingrediente, aquella ocasión en que por primera vez probe una delicia de tal magnitud.

Aun creo que aunque las cosas no siempre son iguales, no pierden su escencia. Esa es mi esperanza.

Quisiera creer que hay cenas que se hacen con amor, que hay platillos que se viven con amor.

Que los detalles no son todo. Que la comida que se comparte es una bendición. Que en todo momento se puede expresar el amor.

Ahora me falta una cena rómantica... con amor.

Entradas calientes

Pues ayer fui al Kyo a cenar con un amigo. ¡Uff! ¡Que cena! Desde la entrada al restaurante tengo que admitir que no imaginé la noche tan a gusto y "deli" que iba a pasar...y luego palabras tiernas bajo la lluvia awww.

Jajaja para empezar, ¿que es eso de que el mesero no conozca el producto? Así como tiene sabe recomendar los "drinks" tiene que conocer los platillos y saber recomendarlos, pero tengo que agradecerle por saber servir los tiempos y por su recomendación del drink, "deli" por cierto.

No se que fue lo mejor de la noche, aun estoy entre la compañia, o analizar a la pareja de enfrente que nos dio todo un espectáculo y vaya ¡como nos reímos! Pero también nos hicieron reflexionar muchísimo.

Creo que fue una cena en la que cada acontecimiento era parte de un aprendizaje, como siempre, así que por eso, he decidido publicar hoy en el blog.

Para empezar, tengo que admitir que me sentía orgullosa (como casi siempre) por mis elecciones en los platillos la entrada la recomiendo ampliamente creo que era calamar jajaja tendre que ir otra vez pero creo que era el unico calamar que hay como entrada, deli deli yummi yummi, excelente chef en realidad, pero sus especialidades definitivamente son los platillos calientes, en especial, las entradas calientes. Los platillos frios definitivamente no son su fuerte.

Después seguimos con sushi, obviamente si ibamos a un restaurante oriental y cenabamos sushi la decisión no iba a ser tomada por mí, así que ordenamos Sushi Dinamita y Sushi Camaron Roca (deliciosos, tengo que admitirlo) y yo quise pedir también algo más ¿como ibamos a ir a un restaurant oriental solamente a probar sushi? pero honestamente, no podíamos con más. ¡Ja,ja, ja! Así que se cancelaron los camarones fritos (oh decepción!) pero el calamar frío (el cual yo no vi en salsa... pero bueno...) no me gustó... no se... hmmm no estaba lo suficientemente fresco, por ende no tenia el suficiente sabor y hmmm había algo que no me convenció, tan delicioso que el calamar... en fin... habrá que ir otra vez porque en sus demás presentaciones sabe delicioso. Asi que regresamos a la lección de humildad, no pude haber tomado solamente elecciones acertadas en cuanto a mis platillos, ¿verdad?

Y ver a la pareja... fue... triste. Bueno, tengo que admitir, que la primera impresion fue "esta bien bueno" la segunda fue "la peluca no me deja verlo" la tercera fue "son amantes" la cuarta fue "de ley" y bueno... en efecto, descubrimos que eran amantes. No pregunten como, pero dejemoslo en que hasta la persona mas despistada lo hubiera descubierto.

Llegamos a la conclusión que es triste por varias razones, supongamos "Ok, yo no amo a mi esposa, yo amo a mi amante" (porque hay casos y circunstancias en la vida en que asi es, y en efecto, sufre el esposo en realidad, pocos pero los hay) Si, pero no puedes estar con ella, verdad? Es triste. Es triste no ser suficientemente mujer para no ser la de la foto. Porque a final de cuentas, cuenta la de la foto. O no ser lo suficientemente mujer para que el hombre diga "estoy dispuesto a dejar pasar a otras "novias potenciales" por tener la oportunidad de estar con ella.

Chicos, chicas, por eso dediquemos nuestro tiempo a familia y amigos, salgamos todos los dias a visitar a nuestra familia, a nuestros amigos, y cuando decidamos dedicar nuestro tiempo a compartirlo con alguna persona, que sea una persona que nos de el mismo valor a nosotros, que nosotros le damos a esa persona. ¿Tiene esa persona lo que nosotros buscamos? Demos el siguiente paso. ¿No lo tiene? No perdamos el tiempo. Conozcamos a la persona, no nos dejemos llevar. El enamoramiento dura poco, el dolor dura mucho tiempo, el amor toda la vida. No hay que dejarlo pasar solo porque nos dejamos llevar.

Excelente tu compañia.